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Tieg corta un trozo de tubería para insertarlo en un nuevo sistema de refrigeración en nuestro centro de datos de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.).

Esta familia de ciervos se ha mudado cerca de las instalaciones de nuestro centro de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.).

Crecen flores silvestres alrededor de las torres de refrigeración de nuestro centro de datos de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.).

Aprovechamos al máximo cada centímetro de nuestro centro de datos de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.) para que puedas utilizar servicios como la Búsqueda de Google y YouTube con la mayor eficacia posible.

Cortinas de plástico cuelgan en una sala de redes en el interior de nuestro centro de datos de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.). Aquí llega aire frío a través del suelo. Las barreras de plástico transparente ayudan a mantener dentro el aire frío e impiden la entrada de aire caliente.

Al sobrevolar las instalaciones de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.), se empieza a observar la dimensión de nuestro centro de datos. Las grandes vigas de acero sostienen la estructura y ayudan a distribuir la energía.

En el interior de la sala de redes del campus de nuestro centro de datos de Council Bluffs, Iowa (EE. UU.), los routers y los interruptores permiten que nuestros centros de datos se comuniquen entre sí. Las redes de fibra óptica que conectan nuestras instalaciones pueden operar a velocidades elevadas. Los cables de fibra recorren los soportes de cables amarillos próximos al techo.

Denise realiza el diagnóstico de una CPU sobrecalentada en nuestro centro de datos de The Dalles, Oregón (EE. UU.). Llevamos más de diez años construyendo algunos de los servidores más eficientes del mundo.

Mike cambia una placa base en nuestro centro de datos de The Dalles, Oregón (EE. UU.). Cuando deja de funcionar alguna pieza del servidor, primero intentamos repararla. Si no podemos, la descomponemos en sus materias primas constituyentes (como el acero, el plástico, el cobre, etc.) y reciclamos los componentes.

En el centro de datos de The Dalles (Oregón), el vapor emergente se observa sobre las torres de refrigeración. Estas columnas de vapor de agua crean una ligera niebla al anochecer.

Unas columnas de vapor se alzan sobre las torres de refrigeración de nuestro centro de datos de The Dalles (Oregón). Cuando se ve el vapor de agua (lo que significa que la humedad y la temperatura son bajas), nuestras torres de refrigeración funcionan al máximo rendimiento.

Nuestro centro de datos de The Dalles (Oregón) se encuentra a orillas del río Columbia. Aquí, los miembros de nuestro equipo pueden pescar y hacer rafting, windsurf y senderismo.

Las tuberías no son los únicos objetos de colores en nuestros centros de datos. En nuestro centro de datos de The Dalles, Oregón (EE. UU.), estos cables se organizan por colores, lo cual puede ayudar a reducir los tecnicismos: "Pásame uno azul".

A través de estas coloridas tuberías se produce la entrada y salida de agua en nuestro centro de datos de The Dalles, Oregón (EE. UU.). Las tuberías azules suministran agua fría y las rojas devuelven el agua caliente para que se enfríe.

Patrick does a visual inspection of the water pipes running below the floor of our Douglas County, Georgia, data center.

Norman makes visual inspections to ensure battery banks at our Douglas County, Georgia, data center are charged and ready to be activated at any time.

Ash of our Douglas County, Georgia, data center points out: “Working here has shown me how important the infrastructure is, from the location to utilities, weather, and, most of all, people.”

Nancy designs, implements, tests, and commissions electrical distribution systems that power the data center infrastructure at the Douglas County, Georgia, data center.

Dusk settles around our data center in Douglas County, Georgia, just outside of Atlanta.

Blue LEDs on this row of servers in our Douglas County, Georgia, data center tell us everything is running smoothly. We use LEDs because they are energy efficient, long lasting, and bright.

These colorful pipes in our Douglas County, Georgia, data center send and receive water for cooling our facility. Also pictured is a G-Bike, the vehicle of choice for team members to get around outside our data centers.

Pipes line the inside of our Douglas County, Georgia, data center. We paint them bright colors not only because it’s fun, but also to designate which one is which. The bright pink pipe in this photo transfers water from the row of chillers (the green units on the left) to an outside cooling tower.

Insulated pipes like these at our Douglas County, Georgia, data center have a U-bend (called this due to their shape) so they can expand and contract as the fluid temperature inside the pipe changes.

We keep pipes like these in our Douglas County, Georgia, data center ready with highly-pressurized water in case of a fire. This water, in particular, is cleaned and filtered so if we use it, we don’t contaminate the facility.

Este sistema avanzado de refrigeración por aire en nuestro centro de datos de Dublín aprovecha el clima frío de Irlanda para mantener nuestros servidores en funcionamiento.

Nuestro centro de datos de Dublín (Irlanda) tiene murales realizados por la artista e ilustradora local Fuchsia MacAree.

El techo de la sala de baja tensión en nuestro centro de datos de Dublín (Irlanda) brinda una vista espectacular.

Este transformador de PMDC (es decir, centro de distribución de gestión de la energía) permite distribuir la energía en nuestro centro de datos de Dublín (Irlanda).

Hemos añadido los colores rojo, amarillo y azul a los transformadores de nuestro centro de datos de Dublín (Irlanda).

El agua cristalina refleja la belleza de nuestro centro de datos de Eemshaven (Países Bajos).

El tejado de la estación de seguridad de nuestro centro de datos de Eemshaven (Países Bajos) está recubierto de césped natural.

Estos intercambiadores térmicos tienen un papel fundamental a la hora de mantener una temperatura baja en nuestro centro de datos de Eemshaven (Países Bajos).

Servidores alineados en nuestro centro de datos de Eemshaven (Países Bajos).

Aerogeneradores en funcionamiento cerca del centro de datos de Eemshaven (Países Bajos).

A medida que cae la noche, estas torres de refrigeración por evaporación suponen un método de enfriamiento de la infraestructura de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

En depósitos de agua como los que tenemos en el campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), se guardan reservas de agua para situaciones en las que se pierda el acceso al suministro doméstico. En cada depósito se almacena agua para nuestras torres de refrigeración por evaporación, por si se necesita en caso de emergencia.

En el campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), contamos con generadores clave que ayudarán a gestionar la carga crítica de la planta del servidor si se produce un corte de energía. Aquí se muestran algunos de esos generadores y chimeneas al atardecer.

En este primer plano se destacan los coloridos cables eléctricos que proporcionan energía de reserva a las plantas de datos si se producen cortes de energía en nuestros centros de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

El espacio de oficinas de Google del campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), se encuentra rodeado de plantas autóctonas y áreas de césped.

En una vista más amplia de la estructura de fibra se muestra la compleja red de cables eléctricos que entra en uno de nuestros centros de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), para proporcionar energía a nuestra red de datos.

Varias de nuestras chimeneas y de nuestros generadores clave se sitúan en la parte delantera de nuestros centros de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

Otra vista de nuestros generadores clave centrada en las chimeneas desde un ángulo diferente del campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

Las chimeneas relucen al atardecer en el campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

Una vista aérea de la infraestructura y el centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), en la que se muestra la extensión del campus.

El campus de nuestro centro de datos de Midlothian (Texas) ilumina el anochecer en el condado de Ellis. En la parte frontal se encuentran cuatro depósitos de agua y el área de generadores del gCUB. Un gCUB es un edificio de servicios centrales con cobertura internacional para centros de datos diseñados por Google, y alberga la infraestructura de refrigeración de nuestros centros de datos.

En esta imagen se muestra otra vista del campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), después de los últimos rayos de sol del día.

Otra vista aérea del campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), en la que se muestran los generadores clave y las chimeneas iluminadas en la parte frontal de nuestros dos centros de datos.

En el campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas), el circuito de refrigeración entra al edificio por el lado izquierdo. Mediante una estructura de fibra adyacente, que entra al edificio por dos puntos distintos a la izquierda del acceso del circuito de refrigeración, se proporciona la red de datos al centro de datos.

El campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en Texas, cuenta con 10 MCPs (plantas de refrigeración modular), lo que lo convierte en un gCUB completo (nuestra infraestructura de refrigeración de centros de datos). Tenemos planeado aumentar el número de MCPs en este campus.

Nuestros cuatro tanques de almacenamiento de agua están ubicados entre nuestra estación de bombeo, dos salas de tratamiento químico y 10 plantas de refrigeración modular (MCPs) en el campus de nuestro centro de datos de Midlothian, en el condado de Ellis (Texas).

Mitch ajusta un acoplamiento de válvulas en nuestro centro de datos de Hamina (Finlandia) para conservar el agua marina del golfo de Finlandia en las tuberías de refrigeración pertinentes.

Nuestro equipo del centro de datos de Hamina disfruta pescando en el golfo de Finlandia, cubierto de hielo.

Durante el invierno en Hamina (Finlandia), vemos un bonito paisaje, a medida que el golfo se hiela y se crea esta imagen pintoresca.

En Hamina (Finlandia) se encuentra uno de los centros de datos que tenemos en Europa. Antiguamente, estas instalaciones albergaban la fábrica de papel Stora Enso.

Otra imagen de nuestro centro de datos de Hamina sobre el helado golfo de Finlandia.

En nuestro centro de datos de Hamina (Finlandia), transformamos una antigua fábrica de papel y utilizamos su infraestructura. Los depósitos que aparecen en esta imagen se utilizaban antiguamente en el proceso de fabricación del papel.

Cada centro de datos ofrece sus propios servicios. Esta sala de conferencias de nuestro centro de Hamina (Finlandia) se encuentra junto a una zona de sauna, que los empleados pueden utilizar cuando quieran.

Estas tuberías de colores llevan agua. El centro de datos de Hamina (Finlandia) utiliza aguas grises o no procesadas. El motivo es muy sencillo: en lugar de utilizar agua potable limpia, empleamos fuentes de agua alternativas y limpiamos el agua de forma que se pueda utilizar en el proceso de refrigeración. El agua tiene que procesarse igualmente, pero el tratamiento al que se somete para utilizarse en un centro de datos es mucho más sencillo que el proceso de limpieza para su consumo.

Vista superior de una de nuestras plantas de refrigeración en Hamina, donde se utiliza el agua marina del golfo de Finlandia para refrigerar por completo el centro de datos.

Las plantas que albergan servidores, como estas, requieren una gran cantidad de espacio y una alimentación eficiente para poder ofrecer toda la gama de productos de Google al mundo. Aquí en Hamina (Finlandia), decidimos reformar una antigua fábrica de papel para aprovechar la infraestructura del edificio y su proximidad a las frías aguas del golfo de Finlandia.

Nuestro centro de datos de Hanau se ha construido de manera sostenible con una infraestructura eficiente y respetando el modelo de economía circular que aplicamos a los desechos.

El centro de datos de Inzai se sitúa en un entorno de exuberante vegetación y frondosos árboles. Se trata del primer centro de datos de Google en Japón.

Jeff, responsable de instalaciones asociado en nuestro centro de datos de Lenoir, quema cable en la zona de fabricación.

En nuestro centro de datos de Lenoir (Carolina del Norte), Rachel prepara un carrito para reparar los servidores en los que se almacena la parte de Internet de Google.

Jon quita baldosas de nuestro centro de datos de Lenoir (Carolina del Norte) con unas ventosas para comprobar el estado de las tuberías que hay debajo.

Una fresca noche de primavera cae sobre nuestro centro de datos de Lenoir (Carolina del Norte). Desde este precioso lugar y en plena noche, podemos ofrecer nuestros servicios a todo el mundo.

Neal utiliza un equipo especial para borrar por completo todos los datos de los servidores antiguos en uno de nuestros centros de datos del Lowcountry de Carolina del Sur.

Las primeras luces del día iluminan uno de nuestros centros de datos del Lowcountry de Carolina del Sur.

Una imagen tranquila de los exteriores de uno de nuestros centros de datos, en el Lowcountry de Carolina del Sur. Actualmente, estamos experimentando con este estanque del condado de Berkeley que recoge agua de lluvia, para utilizarlo como fuente de refrigeración alternativa para nuestros sistemas.

Estos conmutadores de Ethernet conectan la red de las instalaciones en uno de nuestros centros de datos del Lowcountry de Carolina del Sur. Nos ayudan a mantener la comunicación y a supervisar los controles principales del sistema de refrigeración.

Conservamos copias de seguridad de todos los datos, por si surge cualquier problema. Este es uno de los lugares donde las creamos: la biblioteca de cintas de nuestro centro de datos del condado de Berkeley, en el Lowcountry de Carolina del Sur. Unos brazos robóticos (que se ven al final del pasillo) nos ayudan a cargar y descargar las cintas cuando necesitamos acceder a ellas.

Esta es una vista más cercana de las cintas de copia de seguridad de nuestra biblioteca de cintas del condado de Berkeley, en el Lowcountry de Carolina del Sur. Cada cinta tiene un código de barras único para que nuestro sistema robótico pueda encontrar la que corresponda.

Disponemos de depósitos de almacenamiento aislados, como este ubicado en nuestro centro de datos del condado de Berkeley, en el Lowcountry de Carolina del Sur, para guardar el agua que se enviará al núcleo del centro de datos para refrigerarlo.

Desde este puesto de control de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma), se supervisa el edificio y el suministro de energía. Para ello, se pueden recibir llamadas desde cualquier punto de las instalaciones, validar solicitudes de reparación y autorizar las reparaciones.

Roger se ocupa de la infraestructura de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma) "para que Google siga haciendo lo que mejor se le da", según nos comenta.

Un empleado de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma) inspecciona las torres de refrigeración.

La luz de la luna y unas luces brillantes iluminan nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma). Estas unidades modulares proporcionan refrigeración a una parte del centro.

Un colorido mural de la artista digital Jenny Odell embellece nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma).

La puesta de sol baña nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma).

Las torres de refrigeración de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma) contribuyen a que nuestros servidores funcionen de manera eficiente.

Esta vista desde arriba muestra nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma).

Cada uno de nuestros bastidores de servidores tiene switches que están conectados con un cable de diferente color. Usamos los mismos colores en todo el centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma) para saber cuál de ellos debemos sustituir en caso de fallo.

Una imagen inusual de la parte posterior del pasillo de servidores de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma). Aquí, hay ventiladores que canalizan el aire caliente y lo dirigen desde los bastidores de servidores a una unidad de refrigeración para que se mantenga circulando. Las luces verdes son los LEDs que indican el estado de los servidores, que se reflejan desde la parte delantera.

Estas taquillas para el borrado de discos de nuestro centro de datos del condado de Mayes (Oklahoma) tienen los colores característicos de Google.

Los técnicos Mounir y Ray realizan tareas de mantenimiento en el generador de nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

La puesta de sol en Saint-Ghislain (Bélgica) ilumina nuestros depósitos de almacenamiento de agua y las torres de refrigeración.

Unas luces con los colores de Google iluminan el vapor que emiten las torres de refrigeración de nuestro centro de Saint-Ghislain (Bélgica).

Este parque solar de Google alimenta nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

El sol resplandece sobre el parque solar de Google ubicado en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

Paneles solares alineados en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

La energía natural que generan nuestros paneles solares está en sintonía con los verdes campos de nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

En nuestro inmenso centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica), el personal se aplica a fondo para que Internet funcione sin problemas.

Como parte de nuestro compromiso por mantener la seguridad de los datos de los usuarios, destruimos in situ todas las unidades de disco duro que han tenido errores, como estas del centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

Servidores iluminados en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

Estantes de servidores alineados en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

Cuando se apagan las luces del techo en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica), los servidores siguen brillando.

Las luces del techo de nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica) se apagan para ahorrar energía.

La sala de aspersores de nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica) es fundamental para nuestro sistema de control de incendios.

Estas taquillas tan coloridas son una parte clave del proceso de borrado de discos en nuestro centro de datos de Saint-Ghislain (Bélgica).

Mabell es gestora de programas del departamento de Logística en el centro de datos de Google de Singapur y habla cinco idiomas: inglés, mandarín, cantonés, coreano y alemán. Se graduó en ingeniería química, tiene un máster en gestión de cadenas de suministro y disfruta del desafío que supone trabajar con personas de otras culturas. Unas palabras de Mabell para aquellos que estén interesados en trabajar en los centros de datos de Google: "Os esperamos con los brazos abiertos para crear juntos un mundo de posibilidades".

Personal de seguridad trabajando en el centro de operaciones de seguridad de nuestras instalaciones de Singapur.

Nuestro centro de datos de Singapur fue el primero en construirse con varias plantas, en lugar de en un único nivel.

En nuestras instalaciones de Singapur, al igual que en el resto de nuestros centros de datos, aplicamos estrictas medidas de seguridad.

Este centro de datos de Google de varias plantas está ubicado en el centro de Singapur.

Solo desde una vista aérea se pueden divisar estas torres de refrigeración ubicadas en la parte más alta de nuestro centro de datos de Singapur.

Nuestro centro de datos de Singapur ilumina la noche.

Estos generadores de reserva de nuestro centro de datos de Singapur suministran energía auxiliar.

Estos paneles de transferencia automática son uno de los numerosos componentes de nuestro centro de datos de Singapur.

Estas tuberías de colores están instaladas en la sala de refrigeración de nuestro centro de datos de Singapur.

Estos depósitos de nuestro centro de datos de Singapur están situados sobre plataformas que tienen los colores característicos de Google.

Bobinas de evaporación y refrigeración de cobre alineadas en nuestro centro de datos de Singapur.

Nuestros dos centros de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.), situados en el centro y a la derecha, están rodeados por las Flowery Mountains, con el área de generadores del gCUB detrás a la izquierda.

Tal y como se ve desde arriba, las sombras se extienden sobre cada uno de los generadores del área del gCUB, ubicada en el campus de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Esta vista aérea muestra la plataforma con ventiladores de la torre de refrigeración en el campus de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Nuestro campus del centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.). no para de crecer y evolucionar. Aquí puedes ver una de las áreas de generadores que estamos construyendo.

Nuestros dos centros de datos del condado de Storey se encuentran a la izquierda, orientados hacia el suroeste en dirección a las Flowery Mountains. Por su parte, nuestro generador de gCUB se encuentra a la derecha. Además, ya tenemos todo listo para empezar a construir otro centro de datos en el terreno que se ve en la esquina inferior izquierda de la imagen.

Nuestros centros de datos de Google cuentan con paneles semitransparentes únicos que los protegen contra el viento, por lo que en los días soleados se crea un efecto arcoíris en nuestra plataforma de refrigeración seca del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Nuestros paneles semitransparentes que protegen contra el viento proyectan una luz roja sobre los sistemas de bombeo de la torre de refrigeración en el campus de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Si se da un apagón en nuestros centros de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.)., contamos con generadores de emergencia para asegurarnos de que están en constante funcionamiento.

Nuestros paneles semitransparentes que protegen contra el viento proyectan una luz azul sobre los sistemas de bombeo de la torre de refrigeración en el campus de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Al anochecer, los generadores de respaldo de nuestros centros de datos del condado de Storey County, Nevada (EE. UU.) se funden con la cordillera de Flowery Mountains de fondo.

Nuestro sistema de refrigeración seca, de colores vistosos y situado a la izquierda, nos permite mantener refrigerados los servidores de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.). Así, podemos conservar los valiosos recursos hídricos de la región.

Un primer plano que muestra los ventiladores situados en la parte superior del sistema de refrigeración seca en uno de nuestros centros de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Otra vista de los paneles semitransparentes que protegen los centros de datos contra el viento, dando lugar a un efecto arcoíris en los días soleados en nuestra plataforma de refrigeración seca del condado de Storey, Nevada (EE. UU.).

Las tuberías de refrigeración atraviesan el campus de nuestro centro de datos del condado de Storey, Nevada (EE. UU.), transportando agua desde y hacia dicho centro para refrigerar nuestros servidores.

Una carretera que lleva al edificio de mecánica del gCUB.

Nuestras tuberías de refrigeración atraviesan el horizonte de Nevada en plena puesta de sol para llegar a los centros de datos del condado de Storey y refrigerar nuestros servidores.

Tasked with bringing fun and culture to data centers, Sheleen’s workdays vary widely. Her responsibilities include daily administrative work and planning site-wide outings and employee summits. “No two days are alike and you often have to switch gears,” she says. “However, our team motto is ‘Bring the Magic.’” Sheleen earned a bachelor’s in business administration with a concentration in marketing. She took on various roles in the hospitality industry and worked as an executive assistant before coming to Google. “I’ve grown so much in the last two years,” she says. “Be patient with yourself, because the only person you’re in competition with is yourself!”

Alex’s chief role is to create documentation by converting technical information into comprehensible written content. “I’ve learned that I thrive in fast-paced environments,” he says. After studying biology and philosophy with the intention of pursuing a career in medicine and the biomedical sciences, Alex first joined Google as an operations engineer. Operations engineers are now the primary audience for his current work. ”Whatever your role may be, you have impact,” he says. “I’ve been amazed by the people I’ve met working here, and the accomplishments we’ve achieved together. It’s a great ride!”

Brian works on systems that monitor his data center’s electrical infrastructure, mechanical cooling infrastructure, and safety systems that keep the data center running. With 10 years’ experience in controls and electricity, he enjoys the challenges of working with new designs and exercising outside-the-box critical reasoning. ”As members of the Data Center Operations team, we’re responsible for keeping the servers powered up and cool,” he says. ”Working in the data center is exciting, fast-paced, and rewarding.” Brian is also a pilot who enjoys flying, and likes to build things in his spare time.

“I enjoy being part of a team that completes major projects on time,” Mario says. “That’s a good feeling, knowing that everyone put in a good day’s work.” Offered many different football scholarships, Mario was a three-year starter on his college football team and earned a BS in business marketing and education. He’s now furthering his education by pursuing Google’s IT Support Professional Certificate. “You have to come in with a great attitude, ready to work,” he says. “Stay focused and be willing to learn on the fly, because the pace can be fast and you have to adapt to change. Just be yourself and give it your all.”

Alex earned an associate’s degree in criminal justice before teaching himself networking and programming languages. Responsible for overseeing machine deployments and troubleshooting network issues, at Google he found that there’s always something new to learn. He greatly appreciates the upward mobility his job provides. ”I enjoy coming to work, because my goal is to learn every day to grow my career,” says Alex. “I also love the environment, culture, and co-workers.” A music fan who does some carpentry on his days off, Alex advises would-be Googlers, “Be a good team player and have a passion for learning.”

Responsible for warehouse inventory and the global logistics programs, Narissa’s skills include inventory management, data analysis, leadership, and reliability. She comes to the role with a bachelor’s in business administration and a minor in computer information systems, and enjoys cross-functional interaction with multiple teams. “Listening is invaluable,” she says. “There’s a lot to learn, so practice listening first.” Narissa also says spending time with her family is her first priority.

Lazo works on various projects in hardware operations, such as verifying that new equipment is properly placed and connected. Local lead of the Black Googler Network internal group, he enjoys working with a team of great people and says he’s learned that change is good. “You have to pay attention to details in my position,” he says. “Things change fast.” When not at work, Lazo is a musician, emcee, and music producer.

As a data center technician and technical writer, respectively, Lazo and Alex combine their talents to help improve our Google Data Centers.

With a background in political science, Ryan spent time in construction operations before coming to Google. Responsible for making internal tools easier to use, his role requires skills in organization, writing, and communication, as well as a willingness to take on the status quo. ”It takes a lot of people from many backgrounds to keep Google up and running,” Ryan says. When not in the office, Ryan says you can often find him behind a camera trying to take the perfect picture.

Laura learned the value of embracing change at Google Data Centers. Responsible for buying data center capacity and identifying market locations, her role requires understanding of real estate market trends and dynamics impacting the data center industry. “We’re working in an industry that is constantly evolving and changing at lightning speed,” she says. “It’s exciting to see the progress made in a short amount of time.” Laura is also an avid downhill skier with a love for travel, cooking, and caring for her son.

Organization, communication, and motivation to keep learning are essential skills in Bre’s role. Responsible for managing the CSA (Civil, Structural & Architectural) and ODC (Offices at Data Centers) programs, Bre enjoys working with a fleet of data centers that spans the globe. “It’s exciting to understand what makes each of our data centers unique,” she says. “I’ve learned to manage the chaos, not stifle it, as chaos helps breed innovation.” When not at work, Bre enjoys rock climbing, golf, and DIY projects.

Janine manages global and transformational business technology projects to automate business processes for Google Data Centers. “One day I could be in Singapore piloting a new technology,” she says. “Another day I could be conducting user experience and acceptance testing in Belgium.” She has a bachelor’s degree in managerial economics and an MBA, is an International Business Lecturer, and also a black belt in kung fu. “Be open-minded about your past work history and future career path,” she says. “There is no ‘one size fits all’ at Google Data Centers.”

Ruby, Jiali, and Mike work together to help improve our Google Data Centers.

Mike spent 10 years as an Army officer and Kiowa Warrior helicopter pilot before coming to Google Data Centers. Responsible for helping personnel respond effectively to facility power and cooling-related incidents, as well as processes, tools, and training that allow personnel to rapidly escalate issues, Mike attributes his success in part to his willingness to learn. “You can't be good at this job by sitting behind a desk,” he says. “You have to spend time learning from the people who are running our data centers. Cross-functional collaboration is critical to getting things done at Google.”

“Life at Google is colorful,” says Jiali, who received the Google Citizenship Award for embodying Google values. A master of reliability prediction models and simulations, Jiali oversees reliability engineering throughout the data center lifecycle. Among his accomplishments, he’s created a digital inventory of Google Data Centers, interpreting the physical buildings as computer-enhanced models. “Know that I won’t stop, I am building reliability models all over the world,” he says. “Join us, and the world’s infrastructure will be in your hands.”

Ruby’s passions and interests align with her career. The passion that drives her is her love of statistics. With degrees in statistics and data science, and a multifaceted analytic skill set including knowledge of programming languages and statistical methodologies, Ruby was excited to see the impact of her work at Google Data Centers. “People value data-driven decisions here,” she says. “At Google Data Centers, you have the opportunity to work where it all starts.”

“Be open-minded and stay true to who you are,” says Christina. Responsible for managing financial forecasting and risk reporting for data center delivery and engineering, Christina analyzes large data sets and interprets their story. She loves to travel and explore, and credits her job with teaching her to maintain a healthy work-life balance. “You’re the most impactful when you take care of yourself,” she says.

"After more than 12 years at Google, each new project is still an adventure,” Gary says, “and the work we do has long-term impact around the world.“ Charged with leading the global team responsible for selecting data center sites and procuring the energy needed to run them, Gary attributes his success in his role to a sense of humility, listening to learn, and asking a lot of questions. A lover of the outdoors who calls swimming to San Francisco from Alcatraz a “magical experience,” he previously spent 10 years in management consulting. To anyone interested in following a similar path, Gary advises, “Have a sense of adventure, an eye for detail, a passion for solving complex problems, and an ability to maintain calm when the outcome seems uncertain.”

Jim spent 14 years as an officer in nuclear submarines before joining Google Data Centers. He now enjoys the challenge of working with a global team that designs large, globally scalable data centers and computers. “Even though I lived in Japan and Bahrain, Google has really taught me how to work and deliver globally,” he says. With a BS in electrical engineering, he attributes his success in part to his strong sense of teamwork and ability to keep learning. “Of course you need technical skills; look how the internet has evolved,” he says. “Imagine what will come next, and the data centers we’ll need to support it.”

Anu’s role requires a technical mind for strategic planning, team management, making sound decisions, and implementing solutions. She has multiple engineering degrees from the U.S. and India, and a background in leadership roles at hardware, networking, and internet search companies. She enjoys anticipating business patterns, problem-solving in high-pressure situations, and helping the team overcome obstacles. “Don’t optimize things based on the short term,” says Anu. "No matter what your role is, take calculated risks, aim for audacious goals, and learn from your failures along the way." In her off time, Anu enjoys running, hiking, painting, and cooking.

Kate manages executive communications, spending much of the day writing and working with media. With a bachelor’s in film/TV, a master’s in social work/psychology, and 20 years’ experience in the communications field, she never expected she’d be working in the data center industry. “I love that every day is different. Learning about data centers and how they work is just fascinating. Especially since I come from a non-technical background.”

Stephen loves coming to work, learning from his fellow employees and discovering what innovations Google and Alphabet are working on. “Googlers don’t just see projects,” he says. “We see the impact our projects have on the lives of billions of users worldwide.” Stephen aligns people, processes, and technology to maintain Google Data Centers and help them scale. He says his first love is his wife and two kids, “closely followed by soccer,” as well as movies, reading, and learning new things. “Google is a journey, not a destination,” he says. “Be ready for the ride, you’ll totally enjoy it.”

“I never imagined that one day I would be working at Google,” Ana says, “but when the opportunity appeared, I decided to take a chance. Why not me?” Responsible for the Global Electrical Safety program, Ana spends her days developing and implementing procedures to optimize electrical safety and ensure that everyone gets home safely at the end of the day. She welcomes the challenges of her job and new life with enthusiasm. “I moved to another country, started a new life, and — besides being far away from family and friends — couldn’t be happier.”

Martin spent much of his career in the entertainment lighting industry before retraining to work at Google as a data center technician. He wasn’t expecting the size of the operation when he first joined and had never seen servers run on the scale Google’s do. “No day is the same,” says Martin. “Routine tasks can be executed easily, but when things go wrong, we have to prioritize our work.” Responsible for looking after data security operations, Martin’s role requires him to be good at organizing and troubleshooting. “It’s always satisfying when you can resolve or help resolve an issue that arises,” he says.

Anne-France, whose job is to improve business operations in Google’s European data centers, enjoys the travel her job entails and the opportunity to interact with people in different sectors. “This is an environment where you touch different technical fields,” she says, “where you can go deep into any level of expertise and where you will work with a lot of experienced people. You will definitely learn a lot from it.” Outside work, Anne-France is an athlete who participates in short-distance triathlons.

Alain’s responsibilities include electrical operations and maintenance, as well as energy management and sustainability projects. With a background in electrical engineering and a multifaceted skill set that includes managing projects and people, Alain’s incredible co-workers are what he likes most about the job. “I’ve learned that what is sure one day, is no more the day after,” he says. “If you are passionate and not afraid to learn, come along!” Offline, Alain is also a scuba diving instructor with an affinity for playing vintage pinball games.

“Join the party,” says Mathilde, a technical writer at Google Data Centers. “Every day is different. No time to get bored.” Mathilde, whose job consists of writing, editing, and archiving procedures for technicians, works for various sites around the globe, meets with all kinds of people, and is highly involved in Google’s thriving women’s community. “Google allows me to be who I am,” she says, “which I appreciate a lot.”

Gert Jan is a technician in hardware operations responsible for data security. An expert analyst and troubleshooter, he says working at Google Data Centers has also taught him valuable skills in team leadership. His favorite part of the job is the opportunity to work on large-scale issues. “Don’t be afraid of making mistakes,” he says, “and focus on quality rather than quantity.” When not at work, Gert Jan enjoys sports, fitness, guitar, and chess.

For John, there’s something thrilling about the magnitude of working at Google Data Centers. “The scale of what we are doing across the regions is nothing like what you might expect,” he says. “It’s an exciting program to become involved in.” Responsible for overseeing commercial aspects of new data center construction sites, John values the encouragement he receives to develop new processes, the opportunity it grants him to make a difference, and — most of all — the people on his team. “Google is a great company to work for,” he says. “Not just the places we work, the free food, and the great facilities, but mainly the people that we get to meet here and on the global program. You get to make friends!”

The ability to multitask is essential for Derek, a data center facilities technician and busy father of three. “We’re here 24/7 for the rare times when things go wrong,” he says. “We’re trained to respond promptly and efficiently to fix any issues as they arise. You get a great sense of satisfaction on a job well done.” In addition to daily operations, Derek is responsible for keeping the data center online and monitoring on-site standby generators. He appreciates the freedom to do his job, as well as the support from his colleagues. “Working at Google has been a very positive experience,” he says. “I have taken on new challenges and learned many new skills. You never know where the job is going to take you from one week to another.”

Every day on the job introduces new people and different challenges for Mick, a technician working in data center operations. With a degree in mechatronics engineering and a background as an electrical and instrumentation technician, this subject-matter expert for fire suppression systems is skilled at troubleshooting and updating systems to maximize performance. “There are always great people here to bounce ideas with and design new ways to make processes more efficient,” he says. “If you enjoy a challenge and meeting new people, Google is the place to be.”

Ray enjoys the variety of his work and learning new things every day in Google’s unique environment. “The culture is like nowhere you will ever see,” Ray says. “There are huge opportunities for career development and strong encouragement for doing so, which makes this, I believe, a great place to work.” As a data center facilities technician, Ray is responsible for overseeing low voltage electrical systems and power monitoring. When not at work, he does some DJing on the side and loves running, electronics, and his wife and two little girls.

“I love how Google values its employees, giving them the opportunity to grow and guiding them,” says Haikal. With diplomas in both machine technology and information technology, Haikal is responsible for keeping the data center network up and running, as well as keeping user data secure. He also enjoys occasionally playing table tennis at work. “Everyone’s a leader here at Google,” says Haikal. “Anyone can ask questions and also give their opinions. What we value is your contribution and your dedication.”

Boasting 15 years’ experience in the maintenance industry, Aishah has a bachelor’s degree in chemical engineering, an MBA in finance, and four beautiful children. She values the variety her job provides, switching focus between finance, legal, and maintenance operations, as well as the opportunity it’s given her to make a large-scale societal impact. She emphasizes that her job has led her to an appreciation for the importance of team diversity. “Embrace the difference in opinion,” she says, “to ignite the imagination and continue learning.”